Las personas que tienen depresión se sienten tristes, pero no todas las personas que se sienten tristes tienen depresión. La depresión es un problema de salud mental, donde la tristeza se vuelve complicada y llega a afectar a la vida diaria de la persona que la padece.

Sentirse triste es algo natural, en especial, en determinadas situaciones. Con frecuencia, las personas que padecen depresión sienten que es algo normal, y no lo detectan como un problema.

Pero, sí la tristeza dura mucho tiempo, incluso en los momentos que no hay razón para estarlo, entonces puede ser una lucha mayor que la tristeza.

¿Sabías que la depresión es una de las enfermedades mentales más comunes entre los adultos? Sin embargo, pocas personas saben diferenciarla de la tristeza.

Descubre las diferencias entre ambas y cómo afecta la depresión a la persona que la sufre, con trucos para saber cómo actuar frente a ella.

¿Qué es la tristeza?

La tristeza es un estado emocional caracterizado por sentimientos de infelicidad y bajo estado de ánimo, es una de las emociones humanas más básicas.

Es una reacción normal y natural ante situaciones dolorosas o molestas. Estos sentimientos pueden ser leves o intensos, dependiendo de cada persona o situación.

A diferencia de la depresión, la tristeza es temporal y transitoria, sin embargo, si dura en el tiempo, puede llegar a convertirse en depresión.

¿Qué es la depresión?

La depresión es muy diferente a la tristeza, aunque puede llegar a confundirse. La tristeza ocurre en una situación particular, pero la depresión ocurre sin previo aviso en cada situación, afectando a la vida diaria de la persona que la padece.

Dura más tiempo e impacta en gran media en diferentes áreas de la vida cotidiana. Es un trastorno mental que tiene un efecto abrumador, la persona suele sentirse apagada y sin ganas de nada, incluso en situaciones que, en principio, deberían ser alegres.

Cómo afecta la depresión a la persona que lo sufre

La depresión puede afectar todas las áreas de la vida, incluidas, entre otras, los hábitos de sueño y alimentación, a los estudios o al trabajo, las relaciones sociales, la salud y la concentración.

Las personas que sufren de depresión a menudo también tienen trastornos comórbidos, como el abuso de alcohol y drogas u otras adicciones, aunque no siempre es así.

Además, puede parecer que solo afecta al individuo que la padece, pero también a sus relaciones sociales. Puede afectar a sus familiares, amigos, compañeros de clase o trabajo y a las personas que lo rodean.

En la vida diaria, afecta a su desempeño en el trabajo o a los estudios, debido a sus bajos niveles de concentración, por lo que afecta de forma directa a la productividad de la persona.

Dejar la depresión sin tratamiento puede conducir a muchas otras complicaciones en la vida personal y profesional. Por eso es tan importante buscar ayuda, no solo para las relaciones y el trabajo, sino por el propio bien.

¿Cuál es el tratamiento de la depresión?

Si crees que padeces depresión o que conoces a alguien que parece estar sufriendo esta afección mental, no te preocupes, existen tratamientos efectivos para la depresión moderada y severa.

Un profesional usará una serie de técnicas para determinar si lo que se siente es tristeza o depresión. Esto a menudo implica hacer preguntas o pedir completar un cuestionario sobre qué tipo de síntomas se están experimentando, cuánto tiempo los ha estado sintiendo y qué tan graves son.

El tratamiento puede ser diferente según cada caso, y solo lo puede recetar un profesional. Puede ser un tratamiento psicológico como la activación conductual, la terapia cognitiva o la psicoterapia interpersonal, además de medicamentos antidepresivos. Incluso terapias grupales.

Los profesionales deben tener en cuenta los efectos adversos de estos medicamentos, por lo tanto, no se puede comenzar un tratamiento sin la ayuda de un profesional.

¿Qué no decir a una persona con depresión?

Es importante saber tratar con una persona que padece depresión, el impacto de sus familiares y amigos puede ser determinante para ayudarle. Entonces ¿qué no debes decir a una persona con depresión?

• ¡No lo pienses más!

Muchas personas con depresión sufren de rumia, que significa repasar repetidamente un pensamiento o problema y puede contribuir a aumentar las sentimientos de impotencia en los pacientes con depresión.

Cuando se le dice a la persona deprimida que deje de pensar en ello, el rumiante tiene más cosas para reflexionar. De hecho, un reciente estudio demostró que aunque las personas que sufren rumia tienden a buscar ayuda, a menudo obtienen frases como esta y causa un distanciamiento social.

• Se como te sientes.

Aunque esta afirmación es empática y pretende ayudar a la persona deprimida a sentirse comprendida, puede ser contraproducente.

Es normal experimentar sentimientos de tristeza, pero la depresión es un trastorno del estado de ánimo que afecta negativamente la capacidad de una persona para asistir a las actividades diarias normales. Declaraciones como esta minimizan el dolor de la persona.

• Podría ser peor.

Las comparaciones con otras personas que luchan en otras batallas rara vez son útiles. Cuando una persona deprimida busca apoyo social, está buscando empatía y compasión.

Aunque puede haber otras personas que padecen cualquier cantidad de afecciones médicas, decirle a una persona deprimida que otra persona lo tiene peor solo hace que esa persona se sienta avergonzada.

No hay respuestas perfectas cuando se trata de apoyar a un amigo o ser querido con depresión, en ocasiones, aunque nuestras intenciones son buenas, hacemos todo lo contrario. Prueba algunas de estas respuestas empáticas:

• ¿Cómo puedo ayudarte en este complicado momento?
• Lamento que te duela, estoy aquí para lo que necesites.
• ¿Te gustaría dar un paseo conmigo? Cuéntame más acerca de lo que piensas.
• ¿Puedo hacerte compañía hoy? Hacemos lo que te apetezca.
• Gracias por compartir esto conmigo, me ayuda a entender lo que estás pasando, cuenta conmigo.

Cuándo recurrir a un psicólogo en busca de ayuda

La psicoterapia es un tratamiento maravilloso para muchos de los problemas de la vida, con miles de estudios que respaldan su uso como un tratamiento eficaz. Pero a veces una persona que padece depresión no sabe cuándo ir a ver a un terapeuta.

Los psicólogos conocen un secreto que numerosas investigaciones han demostrado: cuanto antes se busque tratamiento, más rápido se sentirá mejor.

Al comenzar a observar que la depresión y ese estado de ánimo afecta a la vida diaria es momento de pedir ayuda.

Si piensas que padeces depresión o que conoces a alguien que pueda estar sufriendo esta afección observa todos los síntomas mencionados, un profesional puede ser la ayuda perfecta para solucionar este problema y sentirse liberado.