Traer al mundo a un bebé es uno de los momentos más hermosos que puedes experimentar en tu vida. Todos están felices, sin embargo, en ti se manifiestan ciertos sentimientos de tristeza. Entonces te preguntarás ¿por qué si amo tanto a mi bebé, y a mi familia, no me siento feliz? Cabe destacar que esta situación afecta a más del 40 % de las mujeres y puede presentarse en cualquier madre, incluso sin haber presentado cuadros de estrés o depresión antes del embarazo. También se le conoce con el nombre de tristeza después del parto y suele mejorar o desaparecer después de las dos primeras semanas posteriores al parto. Pero ¿qué pasa si esta tristeza se torna un poco más intensa y no desaparece durante las dos primeras semanas? Entonces estarías en presencia de un problema un poco más grave, el cual es la mayoría de casos sería una depresión posparto.
Cómo puedo saber si tengo depresión posparto
Esta situación que afecta a más de un 10 % de las madres primerizas se manifiesta de forma similar a cualquier cuadro depresivo. Distinguir o diferenciar esta afección de cualquier situación propia del estrés y cansancio que se pueden originar con la maternidad es muy importante. La depresión posparto se caracteriza por una tristeza intensa que impide cuidar de ti misma, del bebé, realizar actividades cotidianas… Por tanto, la calidad de vida de la madre se reduce dramáticamente.
A continuación, te presentaremos una serie de síntomas. Si varios de estos síntomas llegasen a presentarse en conjunto, durante gran parte del día y durante más de dos semanas, debes considerar que estás en presencia de una depresión posparto:
- Desesperación y tristeza profunda.
- Llanto constante.
- Imposibilidad de comenzar o concluir actividades sencillas y cotidianas.
- Pérdida de interés en actividades que antes eran de tu agrado.
- Dificultad para conciliar el sueño durante la noche, situación que se refleja en un cansancio constante y somnolencia durante el día.
- Trastornos alimenticios como pérdida de apetito o ansiedad por los alimentos.
- Sentimiento de culpa.
¿Qué puede causar la depresión posparto?
Esta afección puede ser ocasionada por la incidencia de factores hormonales, emocionales, genéticos e incluso medioambientales. La mayoría de estos factores no se pueden controlar, es un error pensar que la depresión posparto surge como resultado de algo que se hizo o se dejó de hacer. La depresión posparto solo surge de manera espontánea en un porcentaje de las madres primerizas. Las madres que sufrieron algún cuadro de tristeza o depresivo antes del parto son más propensas a sufrir depresión posparto, ya que los cambios hormonales que suceden luego del parto pueden acentuar los síntomas e incidir sobre la aparición de la depresión posparto.
¿Cuándo acudir con un profesional de la salud?
Desde el primer momento que manifiestes alguno de los síntomas, incluso si los síntomas se presentan antes del parto, debes conversar con tu médico y notificarle tu situación. La comunicación con tu pareja y familia también será esencial. Siempre se recomienda que esta afección sea tratada por un especialista, dada su importancia, acudir con un psicólogo es la opción más acertada. Este profesional mediante terapia individual o grupal tendrá todos los recursos necesarios para fortalecer física y mentalmente al paciente. De esta manera, podrá hacer frente a dicha afección. En diversos casos, el psicólogo te podrá recomendar el uso de antidepresivos que estabilicen la producción de sustancias químicas en tu cerebro, las cuales afectan tu estado anímico.
La ayuda familiar durante la depresión posparto
Uno de los graves errores que cometen las mujeres que presentan depresión posparto es aislarse por completo del entorno que las rodea. Uno de los primeros pasos que se deben tomar luego de apreciar alguno o varios síntomas de la afección es entablar una buena comunicación con su pareja y familiares. Esto te ayudará a recibir apoyo y respaldo en los momentos más difíciles como también será un factor determinante que te dará la valentía para recibir ayuda de un psicólogo.